domingo, 25 de diciembre de 2011

La cigüeña del campanario

El pasado viernes, día 23 de diciembre de 2011 a eso de las 20:00 horas, en mi visita a la localidad salmantina de Moriscos, a unos ocho kilómetros de la capital, pude ver la primera cigüeña de la nueva temporada, posada en su nido, sobre la torre de la iglesia de esa localidad.
De esta manera se pone en tela de juicio aquel refrán castellano que dice:
"Por San Blas, la cigüeña verás
y, si no la vieres, año de nieves."

Que cada uno saque su conclusión al respecto, pero fue una gran sorpresa para mí.

¡Bienvenidas sean las cigüeñas!

Como pequeño homenaje al regreso de nuestra
Cigüeña Blanca Ciconia ciconia
-tan abundante por estas tierras salmantinas-,
quiero traer hasta el Blog el poema que compuse, dedicado a ella, y que es el primero que forma parte del libro
"El cocodrilo Cirilo"

"La cigüeña del campanario"

Cigüeña risueña
de pico escarlata,
sube hasta la torre,
toca las campanas.

Cigüeña risueña
de pico encarnado,
guarda tu patita
que se te ha enfriado.

Tienes tres pequeños
muy chiquirrititos,
los mimas, los duermes,
les das con tu pico.

Cigüeña risueña
de plumitas blancas:
quédate en la torre,
toca las campanas.

Autor: Carlos Blanco Sánchez
Ilustraciones: Susan A. Lewis
Página 7 del libro "El cocodrilo Cirilo"
Editorial Escuela Española S.A. Madrid 1986
I.S.B.N.: 84-331-0328-8
C/ Mayor, 4. 200013 Madrid




sábado, 24 de diciembre de 2011

"CANCIÓN DE NAVIDAD" Poesía y Música




Nuestros socios
Josefa Sánchez Sousa,
Isaura Díaz Figueiredo
Soledad Sánchez Mulas
José María Sánchez Terrones
Benito González García
Carlos Blanco Sánchez
junto con los poetas
Verónica Amat y
José Amador Martín
—organizador—,
participarán en el recital poético musical

"Canción de Navidad".

Os esperamos en la bellísima iglesia de San Juan Bautista de Barbalos (plaza de San Juan Bautista) el próximo martes día 27 de diciembre, a las 20h.

lunes, 12 de diciembre de 2011

Recital Poético Musical "De tierra y de sueños" en la ONCE


Este lunes, 12 de diciembre,
dentro de los actos de celebración de Santa Lucía,
AC PENTADRAMA,
en colaboración con la ONCE,
llevará a cabo el recital poético
"DE TIERRA Y DE SUEÑOS".


Nos acompañarán:
Adrían Rincón (músico de la ONCE)
Miguel Martín, Isabel García y María Jesús Sánchez (rapsodas de la ONCE)
Catalina López (poeta y cantante de la ONCE).

Nuestros socios participantes serán:
Montse Villar
Soledad Sánchez
Miguel Sánchez
Josefa Sánchez
Carlos Blanco
Armando Manrique
Ajo Diz
Benito González
Roxana Sánchez
José María Sánchez.

RECITAL POÉTICO DE TIERRA Y DE SUEÑOS
AC PENTADRAMA
ONCE
Lunes, 12 de diciembre
Salón de Actos de la ONCE (C/ Bermejeros, 14)
20,30h
Entrada libre hasta completar el aforo




jueves, 27 de octubre de 2011

JUGO DE TOMATE DRACULIANO

27.10.11

Jugo de tomate draculiano
(Canción para no asustar a los niños en Halloween)

Vampiros, brujas, fantasmas ... todos salen al son de la poesía
(Il. Alberto Montt)

Hoy queremos compartir con todos vosotros un vampírico regalito que nos ha hecho el amigo Carlos Blanco Sánchez . Una cancioncilla para bailar en Halloween, ese día especial en que los monstruos, los difuntos, los fantasmas y vampiros, las brujas y las calabazas ... toman vida. Con humor y chupando tomate ... os presentamos un poema terrorífico.

JUGO DE TOMATE DRACULIANO 

-Preparando Halloween, porque en la escuela todo es posible-
(Canción para no asustar a los niños)

DRÁ-CU-LA,
DRÁ-CU-LA,
DRÁCU-DRÁCU- DRÁCU
DRÁCU DRÁ-CU-LA.


DRÁ-CU-LA,
DRÁ-CU-LA,
DRÁCU-DRÁCU- DRÁCU
DRÁCU DRÁ-CU-LA.


Con el jugo
de dos kilos
de tomates
rojos,
rojos,

Drácula está en la cocina
y allí cocina
a su antojo.


DRÁ-CU-LA,
DRÁ-CU-LA,
DRÁCU-DRÁCU- DRÁCU
DRÁCU DRÁ-CU-LA.


DRÁ-CU-LA,
DRÁ-CU-LA,
DRÁCU-DRÁCU- DRÁCU
DRÁCU DRÁ-CU-LA.


Hace un jugo
suculento
rojo,
rojo,
rojo,
rojo;
una pizca
de pimienta
y me mira
de reojo.

DRÁ-CU-LA,
DRÁ-CU-LA,
DRÁCU-DRÁCU- DRÁCU
DRÁCU DRÁ-CU-LA.


DRÁ-CU-LA,
DRÁ-CU-LA,
DRÁCU-DRÁCU- DRÁCU
DRÁCU DRÁ-CU-LA.


_¿Quieres un poco?
-me dice-

_¿Solo un poco?...
¡Pues qué poco!...
¡O lo tomo todo entero,
o le echo un mal de ojo!



DRÁ-CU-LA,
DRÁ-CU-LA,
DRÁCU-DRÁCU- DRÁCU
DRÁCU DRÁ-CU-LA.


DRÁ-CU-LA,
DRÁ-CU-LA,
DRÁCU-DRÁCU- DRÁCU
DRÁCU DRÁ-CU-LA.


Se lo dejaré probar,
pues lo ha hecho con cariño
y prometa no asustar
ni a las niñas,
ni a los niños.


_¡Claro que lo probaré!...
Solo un sorbito,
pequeño...
¡Acércate,
ven aquí!...
Que tienes manchado el cuello.


DRÁ-CU-LA,
DRÁ-CU-LA,
DRÁCU-DRÁCU- DRÁCU
DRÁCU DRÁ-CU-LA.



DRÁ-CU-LA,
DRÁ-CU-LA,
NO-ME,
NO-ME-QUIERAS,
QUIERAS
ASUSTAR.

Carlos Blanco

Publicado por Sàlvia en: http://bibliopoemes.blogspot.com/





viernes, 21 de octubre de 2011

NIÑOS RAROS


Tomás Hijo, Isabel Sánchez y Raúl Vacas,
ayer durante la presentación de "Niños raros"
Editorial SM en Letra Hispánica. Salamanca.
Textos de Raúl Vacas
Ilustraciones de Tomás Hijo

Niños raros es un álbum ilustrado de Vacas e Hijo editado por SM. La idea original del libro es de Tomás Hijo, buen amigo escritor e ilustrador, quien pensó en un abecedario ilustrado con una serie de niños con alguna cualidad o característica extraña; niño raros, en definitiva. A esa conclusión, la de que hay niños raros, debió de llegar José María Gabriel y Galán cuando escribió los versos que hemos incluido como cita en el libro: “Al ver ciertos niños / me digo yo a veces: / mamíferos, aves, / reptiles y peces".

Tomás esbozó los personajes y les dio movimiento, yo les puse voz y escribí sus historias y Tomás, de nuevo, integró texto e imágenes.
Por la pasarela del libro desfilan el niño alga, la niña de espuma (que podéis ver en la ilustración), la niña cacto, el niño queso, el requeteniño, la niña sombra, el xilofoniño.
Cada imagen va acompañada de un texto que nos acerca al personaje o recrea algún episodio de su vida. El libro cuenta con un romance, un soneto con eco, un poema escrito en versos de cabo roto, una cuaderna vía, un ovillejo... Uno de los objetivos del libro es que sirva a los maestros y a los padres para conocer y trabajar diferentes estrofas o recursos métricos o estilísticos. Este, además de su calidad, es uno de los atractivos del libro.

Creemos que es un buen trabajo, con muchos aciertos en la parte gráfica (la composición, el uso de la tipografía, el manejo de registros y texturas y un acabado muy personal) y en el texto (el ritmo, la musicalidad, la variedad de recursos, el humor y el juego, entre otros). Ilustradores de la talla de Antonio Santos o escritores para niños como Antonio Rubio le han dado su visto bueno y han valorado con éxito el trabajo.
Niños raros es asimismo un homenaje a Los niños tontos de Ana María Matute, al "niño zurdo" de Eduardo Polo y al Romancero de niñas de Luis Cané pero sobre todo a dos niños muy especiales: Arturo y Jia.

Ojalá que este curso podamos ver a los niños raros matriculados en muchos colegios, recorriendo las mesas de las bibliotecas y en las estanterías y habitaciones de muchos hogares.
¿Quién de vosotros no fue un niño raro? ¿Quién sigue siéndolo aún?

El viernes nos juntaremos tres niños raros para hablar de un libro imprescindible en nuestras bibliotecas: Niños raros
Raúl Vacas, poeta raro
Tomás Hijo, escritor, profesor e ilustrador raro
Isabel Sánchez, lectora y bibliotecaria rara
Tres “rara avis” que nos hablaran de lo raro que resulta no leer poesía en estos tiempos

En Letra Hispánica, Calle Peña Primera, 18.
El viernes, 21 de octubre, a las 20,00 h.
Salamanca -Spain-

Aquí tenéis a la Niña de Espuma, para abrir boca:

Romance de la niña de Espuma

Escuchen bien los infantes
de aqueste noble lugar
la historia que aquí les traigo
de la niña Mari Mar.

Era la niña de espuma
desde su llanto inicial
limpia como el agua clara,
jamás hubiera otra igual.

Sus ojos eran burbujas
de suavizante mirar,
su cabello un espumaje
de algas y de coral.

De espumillón era el talle,
de gomaespuma su andar,
de jabón eran sus besos,
de pompas el suspirar.

Gustábale, en el verano,
pasear junto a la mar,
caminar sobre las olas
y dejarse salpicar.

A una fiesta de la espuma
con un mozo fue a bailar
y entre pitos y entre flautas
se enamoró Mari Mar.

Y aquel mozo, que era limpio,
y le gustaba fregar,
con mucha pompa y boato
prometióla desposar.

Con un gran velo de espuma
que ella mandara bordar
el padrino, de su brazo,
condújola hasta el altar.

Fueron días de perdices
y sueños por conquistar,
hasta que el mal una noche
quiso a su puerta llamar.

Cuando la niña en la ducha,
se acabó de enjabonar,
el tapón de la bañera,
solo se fue a destapar.

La niña por los desagües
que van a dar a la mar,
se perdió sin que el marido
pudiérala rescatar.

Cuánto lloró aquel buen mozo,
cuán hondo fue su penar,
aquel extraño suceso
nunca se llegó a aclarar.

Desde ese día el esposo
de la santa Mari Mar,
trabaja en las pompas fúnebres
pues no la puede olvidar.

Aquí se acaba la historia,
justo es recomendar,
que –como crece la espuma,
y al rato vuelve a menguar–
es preciso, si felices,
no dejar de vigilar
el tapón por si el destino
quisiéralo destapar.

jueves, 20 de octubre de 2011

ENCUENTRO LITERARIO CON ANTONIO SÁNCHEZ ZAMARREÑO

ENCUENTRO LITERARIO CON
ANTONIO SÁNCHEZ ZAMARREÑO
El próximo 31 de octubre inauguramos nuestros Encuentros Literarios.
En cada uno de ellos, el autor invitado nos brindará la oportunidad de conocer su trayectoria literaria, su visión del mundo de las letras, su forma de trabajar, sus preferencias... También nos facilitará, previamente, textos propios seleccionados que podremos comentar durante la posterior tertulia literaria.
Para participar y recibir los textos del autor, debéis confirmar vuestra asistencia en el correo de la asociación: acpentadrama@gmail.com

ENCUENTROS LITERARIOS AC PENTADRAMA
31 DE OCTUBRE DE 2011 20H
VÍA LIBRE (Gran Vía, 47)
ENTRADA LIBRE (inscripción previa en el correo acpentadrama@gmail.com )

AUTOR INVITADO:

ANTONIO SÁNCHEZ ZAMARREÑO
Antonio Sánchez Zamarreño es profesor de Literatura Española en la Universidad de Salamanca, donde se doctoró con una tesis sobre poesía contemporánea, dirigida por Víctor García de la Concha, que obtuvo premio extraordinario de Doctorado. En su especialidad ha publicado La poesía de Luis Rosales (1986). Ha preparado ediciones de autores como Fray Luis de León (1991), José Hierro (1995), Miguel de Unamuno (1998) o José Ledesma (2006).
Entre sus ensayos destacan: Claves de la actual rehumanización poética (1999), El barroquismo de la flora en la poesía de Pablo García Baena (2000), José García Nieto: una poética para negar las ruinas (2005) y La poesía habla de sí misma para no ser borrada (2007). Colaboró en el Diccionario de literatura española e hispanoamericana, dirigido por Ricardo Gullón (Alizanza Editorial, 1993).
Ha publicado los poemarios Fragmentos del romano (2003), Celebración del abismo (2007), La nuca del malhechor (2009) y El paladar a la intemperie (2009). Figura en las antologías Las palabras de paso; Poetas en Salamanca 1976-2001 (2001); El corazón de la palabra (2004) y Poemas del cuatro del tres (2006). Acogido a los clásicos, busca en todo lo que escribe austeridad y hondura.





martes, 18 de octubre de 2011

"VENDIMIARIO" Sala de la Palabra del Teatro Liceo de Salamanca


Bajo el título de
"Vendimiario",
componentes del Grupo Literario
Salamanca Letra Contemporánea,
realizaremos un recital, mañana miércoles, 19 de octubre, a partir de las 20:15 horas, en la Sala de la Palabra del Teatro Liceo de Salamanca.
   Los propios autores serán leerán sus creaciones literarias.
  
Orden de participación:

-“La lluvia” (verso), por Miguel Norberto Sánchez López

-“Reflexiones en voz baja” (prosa), por Pascual Martín

-“Memento mei” (verso), por Maribel Domínguez Real

-“ La Ribeira ” (prosa), por Mª José Diz

-Poema sin título, por Luz Mercedes Orrego

-“Somalia” (prosa), por Luis Gutiérrez Barrio

-“Habla el silencio” (verso), por Sofía Montero García

-“En la hora del mar” (verso), por Soledad Sánchez Mulas

-“Yo soy” (verso), por Mª Victoria Díaz

-“Los esponsales del corsario (prosa), por Gloria S. de Castro Prieto

-“Poso y paso” (verso), por Toño Blázquez

-“Extrae de mí” (verso), por Benito González

-“Ritual de estatuas y extrañas maneras de la fuga” (verso), por José Amador Martín Sánchez

-“Soledad de oruga y encuentro de mariposas” (prosa), por Elena Villarroel

-“Salamanca: asombro, belleza y arte” (verso), por Antonio Alonso García

-“Con lápices, plumas y pigmentos” (verso), por Carlos Blanco Sánchez

-“Dónde van a parar las palabras” (prosa), por Almudena Torres Calles de Pedro

-“Una foto de verano” (verso), por Armando Manrique Cerrato

-“Ternura incandescente” (verso), por Montserrat Villar González

-“Anochecer campesino” (verso), por Marcelino Alfonso Diosdado (lee Carlos Blanco)

-“Para después de mi muerte” (verso), de Miguel de Unamuno. Lee José María Sánchez Terrones


Sala de la Palabra
del
Teatro Liceo de Salamanca

Miércoles, 19 de octubre de 2011
Entrada libre y gratuíta.
A las 20:15 horas.








sábado, 8 de octubre de 2011

Paseo Literario por Santa Marta de Tormes con la Asociación Cultural PentaDrama


El próximo jueves 13 de octubre, promovido por la
Asociación Cultural Tierno Galván,
llevaremos a cabo nuestro Paseo Poético
"De tierra y de sueños"
en Santa Marta de Tormes.

Nos reuniremos a las 19h, en la Plaza de la Iglesia, para iniciar un recorrido poético que nos llevará a la Isla del Soto, al Molino, a la Iglesia y terminaremos en el Paseo Fluvial.

Los poetas participantes serán:

Soledad Sánchez Mulas
Elena Villarroel Rodríguez
Benito González García
Josefa Sánchez Sousa
Armando Manrique Cerrato
Montserrat Villar González
Miguel Norberto Sánchez López
Sofia Montero García
Annie Altamirano
Carlos Blanco Sánchez

Esperamos que disfrutéis con todos nosotros
de esta actividad literaria.

¡Os esperamos!

Jueves, 13 de octubre de 2011
19:00 horas
Plaza de la Iglesia
Santa Marta de Tormes
(Salamanca)

jueves, 29 de septiembre de 2011

Aída Acosta Alfonso -Año Internacional de los Bosques-

Una original manera de celebrar el
Año Internacional de los Bosques:

Mi amiga y poeta Aída Acosta Alfonso ha tenido la gentileza de enviarme dos de sus obras pictóricas y, con su permiso, quiero disfrutarlas con vosotros.
Aída también escribe poesía de maravilla y podréis seguirla en su blog:
Gracias por compartirlos con nosotros.

Paisaje de otoño.
Óleo de Aída Acosta Alfonso

Tilo de Navasfrías (Salamanca)
Óleo de Aída Acosta Alfonso

domingo, 25 de septiembre de 2011

Año Internacional de los Bosques. Cedro (Cedrus atlantica) de Gata (Cáceres) -ESPAÑA-

Para celebrar el
Año Internacional de los Bosques,
mi querida amiga y poeta, Mónica Gudino, desde Córdoba -Argentina-,
quiere dedicarnos el siguiente poema basado en los recuerdos de su infancia e ilustrado con la fotografía de este colosal cedro que realicé el pasado verano en la hermosa localidad de Gata (Cáceres) -España-
Este cedro está incluído en la Guía de Árboles Singulares de Extremadura.
Gracias, Mónica, por compartirlo.

-Fotografía del autor-




REMEMBRANZAS DE MI ÁRBOL

El árbol del patio,
con su voz de viento
fue un suave murmullo
saboreando el tiempo.

Siempre por las tardes
fue magia
y
fue nido,
él logro enseñarme
a sentir mis latidos.

Sus ramas formaban
terrazas de cielo
y estrellitas
de aire
vestían mi pelo.
Fueron sus pestañas
palomas violetas
desnudando el trino
de un alma poeta.
El marcó mi ritmo
de brazos abiertos,
con sabia memoria
y sueños despiertos.
Poema de Mónica Gudino

sábado, 24 de septiembre de 2011

Tilo de Navasfrías (Salamanca) en el Año Internacional de los Bosques.


Tilo de Navasfrías (Salamanca) Óleo de Aída Acosta Alfonso
-Click en la imagen para acceder a su blog-

                                                                Fotografía del autor

TILO DE NAVASFRÍAS
Dedicado a la memoria de mi padre,
en el Año Internacional de los Bosques.

Recordaba su esbeltez,
colosal y hermoso tilo,
con porte sublime, erguido,
cuando ayer lo volví a ver.

Vino a mi mente, también,
aquel tiempo tan lejano
cuando asido de la mano
de mi padre lo encontré.

Con profunda devoción,
elevando su mirada,
consiguió que lo admirara
y hoy siento lo mismo yo.

Fue su árbol más preciado,
hoy nos da la bienvenida
al llegar a Navasfrías;
su sombra es un gran regalo.

Me he parado a descansar
y, apoyado en este tilo,
después de un largo camino
he querido recordar.

Carlos Blanco Sánchez


















domingo, 18 de septiembre de 2011

http://agua-lunamaya.blogspot.com/2011/09/rapsodia-de-ilusiones.html

jueves, 15 de septiembre de 2011

En el huerto

Mi gran amiga Sàlvia ha recogido "mi guiño poético" de Facebook, dedicado a las sorpresas con que nos podemos encontrar dando un paseo por la huerta y recogiendo sus preciados dones.
Con ellos, con pimientos, berenjenas y tomates "Cherry"


realicé esta simple composición que Sàlvia ha llevado hasta las páginas del más prestigioso Blog de Poesía Infantil como es:
Con este sencillo poema que colgué en Facebook y la ilustración de Paul Megens www.paulart.nl
la Biblioteca Pública de Cocentaina, de la mano de Sàlvia y su Blog "Bibliopoemes" me he sorprendido esta tarde.
Gracias por el regalo.

UNA SONRISA, UNA POESÍA

Ilustración de: Paul Megens


Busca en el huerto sonrisas,
despacio,
no tengas prisa.
                                   
                                                                                                         Carlos Blanco

miércoles, 7 de septiembre de 2011

Estas son las primeras propuestas de
Salamanca Letra Contemporánea
para el el Curso
2011-2012

Salamanca Letra Contemporánea

Septiembre y octubre de 2011


¡Hola a todxs!
Después del descanso estival, volvemos con nuevas actividades para septiembre y octubre. Comenzaremos con un encuentro en el que, sin movernos de la Iglesia de San Millán, recorreremos el legado patrimonial que ha dado forma a la ciudad a través de los siglos. Después proponemos un recorrido real por los lugares en los que se erguía una parte de la ciudad que desapareció hace 200 años. Anímate también a participar con alguno de tus textos (recientes o no) en el primer recital del nuevo curso.


Encuentro
Sábado, 17 de septiembre
Monumenta Salmanticae
Centro de Interpretación sobre el Patrimonio Arquitectónico y Urbano de la Ciudad de Salamanca. Iglesia de San Millán (calle Veracruz, al final de Libreros) 18,00 h

El Ayuntamiento de Salamanca y la Fundación del Patrimonio Histórico de Castilla y León presentan, en este innovador espacio, los valores patrimoniales y urbanos que merecieron la declaración de la capital del Tormes como Ciudad Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. El fraile ermitaño Emiliano Monumentii será nuestro guía. Además, recreaciones virtuales, infografías y otros elementos audiovisuales nos mostrarán la evolución urbana de la ciudad o imágenes antiguas del patrimonio histórico-artístico.
N.B.: Se trata de una visita guiada teatralizada abierta al público en general (se ahí el fijar este día y hora).


Encuentro
Miércoles, 28 de septiembre
La Salamanca desaparecida
Plaza de las Agustinas (junto a la Purísima ) 20,00 h
Hace 200 años, Salamanca era una ciudad muy diferente a la que hoy conocemos, ya que la Guerra de la Independencia provocó la pérdida de un tercio de su patrimonio monumental. Esta visita guiada pretende que nos resulte más fácil imaginar cómo era esa “Salamanca desaparecida”; para ello, nuestro guía se apoyará en textos de diarios escritos por algunos de los testigos de aquellos acontecimientos. El reto esta vez va más lejos: reconstruir la ciudad en nuestra mente, ponernos en la piel de los salmantinos de la época… y escribir sobre ello.
Duración aproximada: 1h 30’


Recital
Miércoles, 19 de octubre
Vendimiario
Sala de la Palabra. Teatro Liceo 20,00 h
Cada uno puede hacernos llegar, en principio, un texto en prosa o verso, de cualquier temática. Basta con que comuniquéis vuestra intención de participar (923 282716 o info@ciudaddecultura.org, o respondiendo a este correo), ya que el recital se organizará en función del número de personas interesadas.

domingo, 28 de agosto de 2011

PRIMER CONCURSO MUNDIAL Eco-Poesía Tumbes -Perú-

Presentación de la Antología Poética "Centinelas de la Tierra" Poetas UNIVA


« CRONICA DEL III FESTIVAL MUNDIAL DE ECOPOESIA 2011 TUMBES - PERU

15 Agosto 2011
CENTINELAS DE LA TIERRA - PRIMERA ANTOLOGIA MUNDIAL DE ECOPOESIA

Producto de nuestro I CONCURSO MUNDIAL DE ECOPOESIA, desarrollado el año pasado,recientemente presentamos el libro CENTINELAS DE LA TIERRA, primera antología mundial de ecopoesia, publicado por POETAS UNIVA, en cuyas páginas contiene las creaciones de 100 ecopoetas, seleccionados como finalistas. El libro fue presentado en el marco del III FESTIVAL MUNDIAL DE ECOPOESIA 2011 "Ecopoesìa: raíz y voz de la tierra", que realizamos del 14 al 17 de julio en la ciudad de Tumbes - Perú. Luego fue presentado al magisterio tumbesino, otorgándose en calidad de donación 1 ejemplar para las bibliotecas escolares de las Instituciones Educativas que participaron.

La edición del libro ha sido gracias al apoyo de la Municipalidad Provincial de Tumbes, por lo cual agradecemos públicamente a la profesora Lic. Isabel Marjorie Jiménez Gonzales, Alcaldesa de Tumbes.
Les recordamos que el Primer Puesto fue ganado por la poeta colombiana LILIA GUTIÉRREZ RIVEROS, con su ecopoema PLANETA DE BOLSILLO, mientras que el Segundo Puesto lo obtuvo la poeta chilena VERONICA BAEZA YATES con su ecopoema EL SUSURRO DE LA TIERRA, ambas ganadoras recibieron personalmente sus diplomas y reconocimientos. El poema ganador además fue impreso en un afiche, que ha sido distribuido a instituciones educativas y poetas de nuestra región y en los eventos en los que hemos tenido la oportunidad de participar dentro y fuera del Perú. En las siguientes imágenes puedes apreciar estos actos.
Pronto convocaremos al II Concurso, lo haremos con la misma humildad, sin ofrecer premios pecuniarios, sólo diplomas, placas, el ofrecimiento de imprimir un libro con los 100 poemas que salgan seleccionados por el jurado calificador y un afiche con el poema ganador.
Desde estas páginas exhortamos a todos los poetas a convertirse en CENTINELAS DE LA TIERRA a través de su obra poética y acciones que puedan desarrollar en bien de la conservación ambiental en sus comunidades. Reiteramos nuestro agradecimento a los miembros del Jurado Evaluador integrado por: Wilma Borchers de Chile, Hugo Noblecilla y Marco Cabrera de Perú, todos ellos miembros del Consejo Directivo de POETAS UNIVA

La relación de los ecopoemas y sus autores incluidos en el libro es la siguiente:

■1. Planeta de bolsillo - Lilia Gutiérrez Riveros - Colombia (Primer puesto)

■2. El susurro de la tierra - Verónica Baeza Yates - Chile (Segundo puesto)

■3. Un poema para zoe - Alba Lucia Núñez Benites - Colombia (Tercer puesto)

■4. A golpe de ola mansa - Rogger Tang Ríos - Perú

■5. Cuando se nos acabe el cobre - Javier Milanca - Chile

■6. Triste se ve la luna - Gabriela Liliana Blen Hernández - Honduras

■7. Las focas arpas que sollozan - Omar Alberto Santos Balán - México

■8. Botella al cosmos - Pedro Arturo Estrada Z - Colombia

■9. Petición - Hazzel Selene Yen Hernández - México

■10. Amazonas herida - Enrique Alfonso Rico Cifuentes - Colombia

■11. Las aguas de nuestro origen - Oscar Limache - Perú

■12. El río - Eduardo Lucena González - España

■13. De espaldas - Marta Julia Ravizzi - Argentina

■14. El gallito de las rocas emigrante - Chelly Cieza Roca - Perú

■15. A quien me pretenda - Rosalinda Esperanza Mariño Rodríguez - Venezuela

■16. Almas de cemento - Patricia Corral Moiron - España

■17. Eco de una canción - Cecilia Ávila Vásquez - Colombia

■18. ¿No te dice nada? - María de los Ángeles Roccato - Argentina

■19. No ceder - Anselmo Miguel Molinas Adrover - Argentina

■20. Planeta Tierra - Carlos Blanco Sánchez - España

■21. El último árbol - Carlos Luis Blanco C. - Venezuela

■22. Selva inmarcesible - César Augusto Boyd Brenis - Perú

■23. Poderosos - Elvira Sevillano Marco - Argentina

■24. El árbol de la vida - Ernesto Kahan - Argentina / Israel

■25. Futuro - Esteban Gonzáles - Argentina

■26. Yo soy la madre tierra - Francisco Azuela - México

■27. El final de los hielos - Juan Miguel Cruz Suárez - Cuba

■28. Río Almendares - Luis Manuel Pérez Boitel - Cuba

■29. Arrinconado - María Haydee Sandoval Salinas - Chile

■30. Debe haber sensibilidad - Nathalia Corredor Pérez - Colombia

■31. La tierra - Roberto Bianchi - Uruguay

■32. La sed - Rosa María García Barja - España

■33. El gran perito - Gloria Andrea Mejía Rojas - México

■34. Génesis - Martín Córdoba Estelrrig - Argentina

■35. Por el espíritu de la tierra - Ana Schreber - Argentina / Alemania

■36. Una parte de conspiración - Claudia Luna Fuentes - México

■37. Naturaleza en coma - Paola M. Ippolito - Argentina

■38. Especietileno - Enis Mera Riascos - Colombia

■39. Llegará un día - Marit T. Hardeberg Svensen - Noruega

■40. Un sapo - Ulises Carlos Córdoba - Argentina

■41. Desde el futuro - Gladys Quiroz Carcher - Chile

■42. Hombre - Naturaleza - Dilecy Adler - Brasil

■43. El agua - José Rubiel Amaya Amaya - Colombia

■44. Bello amanecer - Edgardo Luis Molinari - Argentina

■45. Madre - Manuel Alonso Matellán - España

■46. Consumma tum est - Jorge A. Rodríguez Colón - Puerto Rico

■47. Pero también vi crecer en lentos espirales - José Alberto Maltaneri - Argentina

■48. Los surcos del cariño - Pepe Sánchez - Cuba

■49. Mariposa monarca - María Elena Solórzano - México

■50. Sin clamor ni gemidos - Beatriz Chiabrera de Marchisone - Argentina

■51. En brazos de la paz y la belleza - Marina Aoiz Monreal - España

■52. Ecos de la selva - Gustavo Ponce Maldonado - México

■53. Se deshiela el planeta - Jorge Ángel Hernández Pérez - Cuba

■54. Planeta herido - Marisa Aragón Willner - Argentina

■55. Los regresantes - Hilda Inés Pardo Mazabuel - Colombia

■56. La tierra - Laura Adriana Palacios - Argentina

■57. Pantanos de Villa - Rocío del Rosario Retuerto Melchor - Perú

■58. Mezquite - Abraham Domínguez Vargas - México

■59. La creadora - Claudio Aníbal Tachino Revello - Uruguay

■60. Oda al río inmenso - Ricardo Torres Gavela - Ecuador

■61. Vergel: natura sabe porque... - Nori Isabel Brunori - Argentina

■62. Ayer sembré un árbol - María Antonia Jiménez Estrada - México

■63. Tierra seca - Sergio Omar García - Argentina

■64. La nave y el arca - Virginia Augusta Isabel Vitali - Argentina

■65. Desaparecemos - Gabriela Rodríguez Chavira - México

■66. Me declaro - Mario Z Puglisi - México.

■67. Desierto - Hernando López Rodríguez - Colombia

■68. Soy un árbol - Orlando Ordoñez Santos - Perú

■69. Oración por la tierra - Inés Araya Echaveguren - Chile

■70. Arbolito - Graciela Ferreyra de García - Argentina

■71. En la humanidad - Juan Pomponio - Argentina

■72. Compromiso con la tierra - Liliana Savoia - Argentina

■73. Primavera - Graciela Martellotto - Argentina

■74. Vasos sanguíneos - Henry García Jaramillo - Colombia

■75. Las dagas - Carlos Alfredo Martino - Argentina

■76. Grito indio por la tierra - María Verónica Gottschlich - Argentina

■77. Samba para Noel - Daniel Barredo Ibañez - España

■78. Poema con eco - Antonio H.A. Fiorentino - Argentina

■79. El río de los bucles albos sin peinar - Marco Antonio Román Encinas - Perú

■80. Con una cerilla - Antonio Ruiz Pacual - España

■81. Universo - Víctor Hugo Gajardo Olivares - Chile

■82. Alegoría sin caverna. Una sugerencia con manos - Amado Martínez Lebrón - Puerto Rico

■83. Entre los escombros (de la conciencia ecológica) - Lidia Díaz - Argentina / USA

■84. Naturaleza muerta - Alicia B. Vittorio - Argentina

■85. Caníbal - Leonor Zaa Olivares - Perú

■86. Islas insondables - Diego Albín Martínez - Argentina

■87. Florescencia - Javier Ubalde Enríquez - Perú

■88. Homilía - Yoandy Castañeda Lorenzo - Cuba.

■89. Resucita - Ana María Figueredo Satizábal - Ecuador / Colombia

■90. Casihombre - Dario Oliva - Argentina

■91. Isla - tierra - M. Ivana Trevisani Bach - Italia

■92. Pachamama - Silvana Torres - Argentina

■93. Hojas de papel - Leonardo Molano Acosta - Colombia

■94. Oración al poeta - Georges René Weinstein Velásquez - Colombia

■95. Agonía - Esthela García Macas - Ecuador

■96. Muestra casa azul y verde - Ricardo Jesús Mejías Hernández - Venezuela

■97. Llueven pájaros - Arabella Salaverry Pardo - Costa Rica

■98. Las ganas de morir viviendo - Rudy Alfonzo Gómez Rivas - Guatemala.

■99. Silencio de titanes - Liliana Cristina García - Argentina

■100. A la memoria del árbol caído - Alejandro Néstor Rivas Castro - Argentina / España

El orden de los poemas, luego del tercer puesto, no significa orden de mérito. Agradecemos a todos los poetas participantes y ofrecemos nuestras disculpas por los retrasos en algunas de las acciones programadas. Aprovechamos además para invitarles a participar del IV FESTIVAL MUNDIAL DE ECOPOESIA que desarrollaremos del 22 al 26 de agosto del 2012 en la ciudad de Tumbes, en el extremo norte de la costa peruana, frontera con la hermana república de Ecuador.



viernes, 19 de agosto de 2011

UN TESORO BAJO LA BÓVEDA
Autor: Carlos Blanco Sánchez

Aún recuerdo a mis alumnos de Gargantilla (Cáceres),
cuando salíamos al campo durante las clases de Educación Física  
y disfrutábamos de unas aventuras y paisajes maravillosos.
Fueron los Cursos Escolares comprendidos entre 1995-2005



Capítulo I 

PUEBLO HERMOSO

   Pueblo Hermoso es un pequeño pueblo de sierra, con casas encaladas y balcones llenos de geranios. Por Pueblo Hermoso pasa un río que, en invierno y primavera, hace mucho ruido pero, el resto del año, suele bajar silencioso. Dicen que en sus aguas se pueden pescar buenas truchas, pero yo todavía no he pescado ninguna. En Pueblo Hermoso hay una iglesia con un gran nido de cigüeña y una bandada de palomas que van y vienen incansables durante todo el día.

                      Gargantilla Vista Gral
Valle del Ambroz, desde Ganrgantilla. Al fondo, Aldeanueva del Camino y Autovía de La Plata. Foto: CBS
  
   Está rodeado de castaños, robles, olivos, helechos y muchos árboles frutales. Casi todos sus vecinos viven de la fruta, incluso los tordos, los gorriones, las urracas, los arrendajos, los rabilargos... Cuando es época, la gente llena cajas y cajas de fruta, tantas que no te lo imaginas. Las llevan a la cooperativa, donde las pesan y seleccionan por variedad, calidad y tamaño. Luego vienen camiones TIR que, después de cargarlas, se las llevan lejos, a algún hipermercado de esos que hay en todas las ciudades y a los pocos días regresan. Así, hasta que se agota toda la fruta de los árboles.
  
   La primera cosa que me llamó la atención cuando conocí Pueblo Hermoso, además de su paisaje, fue su olor. Pueblo Hermoso huele a pueblo, pero a pueblo, pueblo. Huele a heno recién segado, a pan y sobre todo a cacas de mula, de asno y boñigas de vaca. De tantas cacas como hay, a veces, hasta las pisas. ¡Menuda gracia! La gente, cuando ve que al lado de la puerta de su casa hay una caca, saca un escobajo y la barre. Pero en lo que nunca me he fijado es dónde la tiran. A ver si algún día pregunto...
En Pueblo Hermoso las moscas son felices, tienen lo que más les gusta: cacas. A veces hay tantas que, si haces así con la mano, puedes coger varias a la vez. Lo digo en serio.

   La segunda cosa que me llamó la atención de Pueblo Hermoso fue sus pocos niños. Fíjate si son pocos que, aún hoy, a la escuela van poco más de veinte, pero contando los “chipurretos” y todo. Los más pequeños tienen tres años y los mayores doce. Los mayores casi nunca quieren jugar con los“chipurretos”. Bueno, solo cuando el maestro les trae juegos y juguetes nuevos, o aquellos que ya le sobran en casa, de sus hijos. Entonces juegan con ellos, hasta que se los rompen y pronto está el lío preparado: unos corren, otros lloran y nunca falta aquel que se cae y se hace una herida en la rodilla. Luego, el maestro, va a buscar el botiquín y no lo encuentra, como la última vez, pues se quedó olvidado en el autocar el día que fueron al zoo y, cuando más falta hace, no aparece. Que si yo no he sido, que ha sido fulanito, que no, que fue fulanita. ¡Menudo panorama!



Capítulo I I

UN MURAL PARA LA PAZ

   Atrás quedaron los carnavales. Matías, el maestro de Educación Física, anda un tanto mosqueado por una actividad que los alumnos venimos realizando, por propia iniciativa, algunas tardes, en el campo y de la cual nos ha oído hablar a hurtadillas. Los maestros han decidido que, desde primero a sexto, _por ser éstos los que la realizamos_ y aprovechando la cercana primavera, vayamos a visitar aquel lugar tan misterioso, distante de la escuela no más de un kilómetro, pero todo cuesta arriba. Por eso, cuando nos lo dijeron, quedamos sorprendidos y Quique no pudo por menos que sugerir:
   _¡Yo me llevo el “bocata”!
   _¡Eso!, y yo la gorra. _dijo Nico.
   _¡Y yo un palo, para matar lagartijas!
   _¡Qué bruto! _dijo Rita. _¿No tuviste bastante, el año pasado, con tirar los tres nidos de golondrina del tejadillo de mi abuela?
   _¡Eso, Zalo _continuó Jaime _ , y, además, todos tenían las crías recién nacidas! Mi gato se las comió.
   _Sí, pero... ¿y si nos sale un bastardo?
   _¡Pues le hacemos una foto con mi cámara! _contestó Rita.
   _Sí, pero... ¿y si es venenoso? ... _se atrevió Zalo a apostillar.
   _Para saberlo, llevaré mi guía de reptiles. _dijo Julia.
   _Sí, pero... ¿y si acaso me pica? ... ¿qué? ...
   _Pues si te pica, te llevamos al Centro de Salud y ya está. _intervino la señorita Lucía, que es la tutora de primero a cuarto _ . Vamos, abrid el libro de Lenguaje por la página...
   _Señorita Lucía, señorita Lucía, ¿y si me muero antes de llegar al Centro de Salud?
   _Pues nada, abre el libro por la página treinta y siete y comienza a  leer en voz alta.
   Zalo comenzó a leer, titubeante, un cuento de Gloria Fuertes, titulado: “Antón, el dragón”, mientras que en el aula se escuchaba un ligero murmullo.
Pues si se muere lo enterramos y ya está; así no tenemos clase ese día. _Comentó en voz baja Nico.
   _¡Silencio, Nico! Continúa tú leyendo, alto y claro.
Nico terminó de leer el cuento, pero apuesto a que no se enteró de nada. ¡Qué habrá pensado Gloria Fuertes desde allá arriba! ...


   La mañana se desarrolló con normalidad. Durante el recreo los alumnos de quinto y sexto quitaron las malas hierbas del huerto escolar que, por cierto, es la envidia de todo el pueblo. Los de tercero y cuarto lo regaron con la regadera, para gastar menos agua _como les ha enseñado la monitoria de Educación Ambiental en las Actividades Formativas de la tarde_. Los de primero y segundo recogieron las malas hierbas y las echaron en la zona de compostaje. Los “chipurretos” estuvieron plasmando sus manos, impregnadas de témpera blanca, sobre el mural que, entre todos, hemos hecho en homenaje a las víctimas del atentado terrorista del 11-M ocurrido en Madrid. La verdad es que ha quedado precioso, pero un escalofrío recorre aún nuestro cuerpo cuando recordamos lo que pasó hace unas semanas. ¡Qué brutos!... Parece imposible que alguien pueda hacer algo así...
   _Podríamos dejarlo puesto en el vestíbulo del “cole”, _dijo Diego, mientras lo colocábamos con cinta adhesiva en la pared_, y así nos acordaremos cada vez que lo veamos.
   _¡Genial!, _contestó Paula, _y podríamos dejarlo ahí, para siempre. A todos nos pareció una idea estupenda y, desde entonces, preside la entrada de nuestro colegio, bajo el título:

“POR LA PAZ Y CONTRA EL TERRORISMO”


Capítulo III

COMIENZA LA MARCHA


   Abril se despereza. El campo está como una olla a presión, ansioso de sol. En cualquier instante asistiremos a una explosión de la primavera. Este año los cerezos no nos han permitido disfrutar de su manto blanco pues, cuando quisieron extenderlo, vino una racha de frío por carnaval y nos privó de tan magno espectáculo.
   Hoy ha amanecido un día estupendo. Como tenemos salida al campo, todos hemos venido puntuales al colegio, incluso Fonsi, quien muchos días, acostumbra a llegar tarde.
   _¡Mirad qué “bocata” ha traído Quique! -Gritó Diego, señalándole con el dedo-. ¡Casi se le sale de la mochila!
   Todos nos reímos pues, la verdad,  era un señor “bocata”. Quique es el más grandullón. Tiene un “pequeño” problema de peso, pero no hace caso a los consejos que, sobre alimentación, nos hace Matías, el “profe” de Educación Física. A Quique le gusta comer de todo, cuanto más, mejor. Dice que le encanta el tocino “untao” con pan, la tortilla de patata, el chorizo, los pasteles... A Quique le brillan los ojos cada vez que alguien habla de comida: se relame, disfruta, suda y hasta babea de gusto con sólo pensarlo. A nosotros eso nos hace mucha gracia. Zalo se mete mucho con él y siempre andan a linternazos. A diferencia de Quique, que es todo humanidad, Zalo es como una comadreja, pequeño, fino y vivaracho. Quique jamás podrá ser el líder de la clase pues, para eso, hay que ser el más veloz, el más ágil, el que mejor juegue a fútbol... aunque después te queden tres o cuatro. En eso sí que se parecen. A Quique lo de dar vueltas alrededor del patio no le hace mucha gracia, ni al “pilla-pilla”, ni a “torito en alto”, ni al “pati”, ni a los "circuitos", aunque sean de lo más “chachi”. A la peonza... bueno, a la peonza solo un poco, mientras le baile de pico pero, por lo general le baila de culo y eso le desespera un montón. A Quique solo le gusta comer y, en cuanto te descuidas, se sienta.

   _No os dejéis la gorra, ni el agua, ni el “bocata”. -Recordó Lucía-.Son más de las nueve y tened en cuenta que antes de las doce y media tenemos que haber regresado. Los más pequeños irán delante y los mayores detrás. Ya sabéis: nada de voces, no tiréis piedras, ni asustéis a los animales. Que nadie se suba a las paredes. No cortéis lavándula. Respetad todas las plantas. Podemos ir hablando, sin separarnos unos de otros. Cuidado con ...
   Mientras Lucía seguía con su lista interminable, la mayoría ya estábamos en la puerta de acceso al patio. Qué nos iba a decir a nosotros con tantas recomendaciones, cuando estamos hartos de subir campo a través, saltando sobre las peñas, escondiéndonos detrás de las escobas negarles, lanzando piedras a diestro y siniestro. Y si no, que le pregunten al perro de Jeremías que salió, ladera abajo, con el rabo entre las patas y emitiendo un “gay, gay, gay” que se escuchaba en varios kilómetros a la redonda. Su padre todavía anda por el pueblo buscando -muy indignado-, al que le colocó un cepo de cazar pájaros en el rabo. Aquel día hicimos un juramento y el que lo rompiera, sería expulsado del grupo de la actividad de la tarde, la que tiene un tanto “moscas” a los maestros. Además, quedaría como un chivato y eso sí que no. A mí me da que el padre de Jeremías está atufado con Zalo, pero él tan tranquilo. El día menos pensado se la busca. Se lo hemos dicho mil veces pero, allá él...

   Berta y sus alumnos de infantil se quedan en el colegio. Dentro de unos días saldrán hasta la piscina natural. Han quedado cantando “El Minué”. El ganso de Fonsi, encaramado en la ventana, los dirige con el dedo índice, mientras cantan:

“En un salón francés
se baila el minué,
en un salón francés
se baila el mi, nu, é.”

   Así fue como, a ritmo del “Minué”, los catorce alumnos con nuestros “profes” Poli, Lucía y Matías, después de habernos echado un vistazo por encima y ver que estábamos todos -aquí lo de pasar lista no hace mucha falta-, emprendimos la corta, pero agotadora caminata hasta un lugar, para ellos, lleno de misterio. Fonsi se incorporó al grupo después que la señorita Berta, tras reprenderle, tuviera que cerrar las ventanas del aula. Pero él venía silbando, tan rítmica canción, como si tal cosa.
  
   El patio quedó atrás, solitario. Ni las notas del “Minué” incomodaban a la media docena de gorriones y una urraca que se disputaban unas migajas de pan y un trozo de mortadela siciliana -con aceitunas- las cuales, no sé cómo, pero habían caído del bocadillo de Quique. Éste, no pudo aguantarse y, en un santiamén, ya le había hincado el diente.
   _¡Que aproveche! -Le dije.
Sin abrir la boca -por si acaso se le caían parte de tan exquisitos manjares-, se volvió hacia mí, estupefacto, pues no esperaba que un compañero pudiera haberlo sorprendido infraganti. Presto lo guardó en la mochila. Con un guiño de complicidad y haciéndome un gesto con la cabeza, me dio a entender que no dijese nada a nadie y rápido nos incorporamos al grupo.


Capítulo IV

EL ENJAMBRE DE AVISPAS



   Como una pequeña legión de hormigas subíamos escrutando la falda de la montaña. La marcha era lenta y el sendero sinuoso. Cada dos por tres hacíamos un alto para admirar el paisaje. Miraba hacia atrás y podía ver cómo el colegio se hacía cada vez más pequeño. La iglesia, las casas con sus chimeneas, los árboles y el pueblo, en general, semejaban una maqueta con toda serie de detalles. Hasta la vida en el pueblo parecía haberse paralizado. Por el contrario, a medida que subíamos, me sentía cada vez más grande. Era algo sorprendente.
   El sol comenzó a asomar por la cresta de la montaña y nosotros estábamos allí, queriendo alcanzarlo; pero él, como si de una gran cometa se tratara, subía y subía, sabedor que jamás podríamos acariciarlo ni con las yemas de los dedos.
   Los maestros se fueron quedando atrás, formando grupo. Junto a ellos Quique y algunos de los más pequeños. Zalo, al igual que el bíblico Moisés arengando a los israelitas, se había adelantado unas decenas de metros y apareció encaramado en lo más alto de una peña. Llevaba un gran palo en su mano derecha, a modo de bastón. Levantó los brazos y, en esa postura, seguro que se creyó el ser más importante del mundo.
   La visión de Zalo sobre la gran roca animó la expedición. A él le siguieron Fonsi, Jaime, Nico y Diego. Estaba bien claro quién era el líder del grupo. Había hecho caso omiso de la recomendaciones de no llevar palos, de no separarse del grupo, de no salirse del camino y de no subirse en lugares peligrosos.
_¡No hay quien pueda contigo! _le dijo Poli, nuestro tutor.
_¡Una foto! _gritó.
_¡Eso!, ¡queremos una foto! _dijimos los demás.
   Matías tomó la cámara de fotos de Rita. Se colocó frente a la roca, enfocó hacia arriba y... ¡Click! Ya habían pasado a la posteridad, con sus brazos en alto, desafiando la altura y dejando boquiabiertos al resto de sus compañeros más pequeños.
   _¡Una lagartija! ¡Una lagartija! _dijo Rita, señalando con el dedo.
   _¡A ver, a ver!... ¡Dejadme a mí!... ¡Que yo la cojo!...
   Zalo dio un salto y, como si de un pequeño Tarzán de los monos se tratara, apareció junto a Rita pero, justo en ese momento, la lagartija desapareció por entre una de las grietas de la gran peña.
   A Zalo le encanta capturar cualquier animal: lagartijas, grillos, ranas, galápagos... Por tener ha tenido hasta un mochuelo. ¡Y eso que es una rapaz protegida! A las salamanquesas, cuando en las noches de verano se pasean por las fachadas de las casas buscando polillas que comer, Zalo las persigue a escobazos porque dice que son venenosas y que se le meten en casa. Zalo es bastante ignorante, pues no sabe que las salamanquesas nos libran de todo tipo de insectos perjudiciales y que son inofensivas. A las mariposas “Pequeño pavón” _muy abundantes por ésta zona_, esas que son así de grandes y que tienen en cada una de sus alas un dibujo como si fuera un ojo; si las ve en el suelo, las despanzurra con todas sus fuerzas, porque piensa que están medio muertas y ya le hemos dicho, mil veces, que eso no es verdad. Pero a él le da lo mismo. Como se enteren en el SEPRONA se va a enterar.
   _¡"Cagondiez"!... ¡Si pillo a esa lagartija le corto la cola!
   _¡Qué bruto eres, Zalo! ¿Y si te la cortaran a ti?
   _¡Yo no tengo cola! (...)
   Tras una gran risotada general, rojo como un pimiento morrón, pudo darse cuenta del ridículo que había hecho, a pesar de ser quien era: el líder.
   _¿Falta mucho? _preguntó Lucía.
  _¡Estamos llegando! _dijo Quique, quien llevaba encima un sofoco de tres pares de narices_. Si acortamos por ahí, llegaremos rápido. Es allí arriba, cerca de aquel roble que está junto a las zarzas.
   Se sentó, sacó su botella de plástico y bebió un gran trago de agua.
   _¡Puf, qué paliza! Podríamos parar aquí un rato para comer el bocadillo. _dijo Quique, mientras un reguero de agua le empapaba la pechera de la camiseta mezclándose con una gran mancha de sudor.
   La expedición continuaba el ascenso y el grupo empezaba a romperse, ya por el cansancio, ya porque intuían próxima la meta.
   _¡STOP! _gritó Matías, después de tocar su silbato hecho con una tibia de cordero y sabedor que todos íbamos faltos de fuerzas_. ¡Venid aquí! Descansaremos un rato. No os llenéis de agua y reservad el bocadillo para cuando lleguemos.
   Matías se sentó, se quitó la gorra y limpió el sudor de su frente con el antebrazo. Costó reunir al grupo disgregado pero, como los que iban delante vieron que los demás nos sentábamos, al poco, retrocedieron.
   Desde este lugar se divisaba un inmenso valle. A lo lejos, las montañas tocaban las nubes con sus crestas. Algo más cercano, a la izquierda, el pantano parecía un diminuto espejo. Todo lo demás era un inmenso lienzo verde. Reinaba una paz abrumadora, sólo rota por el ir y venir de vehículos que transitaban, a lo lejos, por la carretera y un avión a reacción que iba dejando una gran estela blanca. Tan grande se veía el valle desde aquí arriba que, si el fin del mundo existía, seguro que estaba allí, detrás de aquellas montañas, un poco más allá de donde nos alcanzaba la vista. Y aquí estábamos nosotros, viéndolo todo, desde tan privilegiado observatorio.
Atardecer en el Valle del Ambroz. Foto: CBS

   _¡Arriba, valientes! _Nos alentó Matías, poniéndose en pie.
   Como un resorte nos levantamos. Todos menos Jaime, el cual había estado todo el rato hurgando, con una paja seca, en un agujero que había en el suelo y en el que, según él, se escondía un grillo.
   _Pero si aún no hay grillos. _le dijo Lucía_ Los habrá dentro de poco tiempo. Ahora son tan pequeños que aún no tienen alas, por lo que no pueden cantar. Por cierto, a que no sabes cómo se llaman las alas de los grillos.
   Jaime, la miró pensativo y, viendo que los demás continuábamos la marcha, desistió de su tarea, ignorando la pregunta. Dio un fuerte puntapié a la supuesta grillera y corrió a reunirse con los demás.
   _¡Élitros!, se llaman élitros. El sonido lo producen por fricción.
   ¡Que cosas nos cuenta la señorita Lucía! Élitros, élitros. ¡Hum! ... ¡Menuda palabrita! La verdad es que la señorita Lucía sabe muchas cosas. Claro, como lee tantos libros.

   El grupo se estiraba. Los mayores habíamos tomado posiciones al frente del mismo. Zalo, con su palo de castaño, encabezaba la expedición bastantes metros por delante de los demás.
   _¡Mirad qué he encontrado! _gritó, desde lejos, mientras señalaba con su palo.
   _¡Algún tesoro! ¡Zalo ha encontrado un tesoro! _gritaron desde el final.
   Jadeantes y sudorosos corrimos todos hasta el lugar señalado y todos nos pusimos alrededor de aquella cosa que Zalo había encontrado, semi escondida en un zarcerón.
   _¡Ostras! _exclamó Diego. _¡Qué chulada!
   _¡Una calavera! _apuntó Edu.
Los maestros se abrieron paso entre el grupo, se acercaron y Poli exclamó:
    _¡Solo es un cráneo de oveja! _y se retiró.
   _Pero Poli: cómo va a ser de oveja, si las ovejas no tienen cuernos. _intervino la señorita Lucía.
   _Pues entonces ... ¡de ovejo! _dijo Poli riéndose.
   _¡De “ovejo”, de “ovejo”! Tú sí que estás hecho un buen “ovejo”. ¡Es de cabra! ¿No le ves los cuernos? _ la señorita Lucía, separándose del grupo, se desternillaba de risa.
   _¡Quita de ahí! _dijo Zalo a Manu apartándole de un empujón_. Lo sacaré con mi palo.
   _¡Vaya modales! _le recriminó éste.
   Zalo lo intentó, aunque parecía casi imposible hacerse con tan preciado tesoro. Matías se acercó, estudió la situación y, después de aplastar con sus pies el zarcerón, cogió a Zalo por la cintura. Éste, metió el palo por una de las cuencas del cráneo y, después de no pocos pinchazos y enganchones, por fin, pudo hacerse con él.


   _¡Ya es mío! ¡Ya es mío! _gritaba, inconsciente de los jirones que se había hecho con la zarza en la camiseta.
   Zalo introdujo la punta del palo por la parte posterior del cráneo. Lo cogió firmemente y apoyándolo en el suelo, alzó los ojos al cielo y, con voz ceremoniosa, exclamó:
   _¡Soy el jefe de la tribu!
   Al instante, un enjambre de avispas surgió del interior del cráneo. 
   Al verlas, todos corrimos desesperados en busca de refugio, entre gritos y manotazos al aire. Todos menos Zalo, quien ignorando lo que acontecía a su alrededor, con voz sublime, volvió a exclamar:
_¡Yo soy Zalo, GON-ZALO, el Gran Jefe!
   En ese instante, lanzó el palo por los aires, corrió hacia el grupo como viento que lleva el diablo, echándose mano a la oreja derecha y, mientras gritaba desaforado, no pudo por menos que pasar por mi memoria el perro de Jeremías.
   _ ¡”Cagüen” la leche! ... ¡”M´agujereao” la oreja! ... ¡Ostras! ...
   Mientras nos partíamos de risa después de tan cómica visión, enmudecimos cuando, en un alarde de valor, volvió sobre sus pies y, al poco, regresó portando el largo palo coronado por el cráneo de cabra. Se sentó en el suelo, frente a nosotros. Inclinó el palo a la vez que nos mostraba la blanca calavera y, apretando fuertemente las mandíbulas dijo, mientras por su ojo derecho asomaba una lágrima de dolor:
   _¡Ni una! ¡No he dejado ni una! _refiriéndose a la avispas.
   No había duda. Acababa de auto coronarse como lo que realmente era. Todos le miramos ensimismados, con envidia por no poder llevar aquel símbolo que lo hacía parecer tan distinguido.
   Reinó el silencio. Sin saber cómo, todos aparecimos reunidos, agazapados y mirándonos unos a otros. La situación de pánico vivida hacía unos momentos, sin más contratiempo que la picadura de la avispa en la oreja de Zalo, nos había hecho buscar cobijo.
   _¡Pero, si ya hemos llegado! _dijo Quique mientras daba un salto de alegría.
   _¡Es cierto! _aseguraron Diego y Nico.
   La pequeña Violeta, de primero, apareció abrazada a la señorita Lucía. Violeta es poco habladora y muy tímida. En su rostro aún podía verse una clara expresión de miedo.
   No te preocupes, Violeta. Todo ha sido a causa del avispero que había en el cráneo de la cabra. Las avispas, al ser molestadas por Zalo, sólo han tratado de defenderse. _ explicó Lucía, mientras le recomponía una de sus coletas.
   La oreja de Zalo ya había comenzado a inflamarse, pero él declinó cualquier atención que, por nuestra parte y por parte de los maestros, le fuera ofrecida.
   _Un poco de barro y ya está. _dijo Poli, pero su orgullo era tal que lo rechazó.
   _Las avispas, cuando pican, _comentó Manu, el compañero de cuarto, _sólo inyectan el veneno y ya está; pero las abejas se mueren después de picar.
   _¡Es cierto! _dijo Diana_ ,lo he visto en un programa de “La 2”. Y sabéis por qué se mueren. Se mueren porque al tener un aguijón en forma de arpón, cuando lo clavan, se queda dentro y, junto con la bolsa del veneno que está en su abdomen, se desprende del cuerpo de la abeja. Por eso se mueren. Luego, a causa del dolor, te frotas y lo único que haces es inyectarte, sin quererlo, más veneno.
   _¡Pobrecitas, con lo rica que está la miel! _intervino Rita.
  _Sí, pero cuando pican... pican y eso duele mucho. _apostilló Paula.
   Que le pregunten a Zalo. _se atrevió a decir Quique, entre risas.
   Aquel lo miró de reojo y, desde entonces, yo creo que se las tiene juradas.


   Pero lo cierto es que allí estábamos todos, bajo el cobijo de una bóveda circular hecha con piedras. Las bóvedas son construcciones que fueron hechas en huertos y fincas, por los pastores y gentes del campo, hace muchos años. Desde ellas cuidaban su ganado,
mientras se resguardaban de la lluvia, el frío o el calor. También servían como lugar de descanso.
   Sentados en el suelo, en círculo, guarecidos bajo aquella especie de cueva y creyéndonos allí apartados del resto del mundo; Quique volvió a comentar, mientras echaba mano de su bocadillo, a la vez que le propinaba un buen mordisco:
   _¡Si ya hemos llegado! ... _dijo con la boca llena.
   _¡Es verdad! _respondió Jaime.
   Un ambiente de júbilo envolvió el interior de la bóveda, mientras todos sacábamos nuestras viandas.

(Continuará)...